
Un grupo de científicos realizó un estudio importante sobre un tipo especial de células del sistema inmunitario llamadas células T reguladoras o Treg. Estas células ayudan a controlar la inflamación y mantener el equilibrio en nuestro cuerpo.
Las investigaciones mostraron que estas células Treg no permanecen siempre en un mismo lugar. En cambio, muchas de ellas entran y salen de los tejidos en los que viven, en un proceso que dura solo unas semanas o meses. Sin embargo, algunas Treg parecen quedarse mucho más tiempo en ciertos órganos, como la grasa o algunos tejidos específicos.
Lo interesante es que estas células Treg en los tejidos no parecen ser siempre las mismas. Muchas de ellas hacen un movimiento de entrada y salida y cambian según las necesidades del cuerpo y del órgano en el que están. Algunos tipos de Treg parecen tener un «destino» específico, guiadas por su propio receptor (una especie de llave que reconocen ciertos estímulos), aunque todavía no se entienden todos los detalles.
Este descubrimiento es importante porque ayuda a entender mejor cómo funcionan las células que controlan la inflamación y qué podemos hacer para mejorar tratamientos en trasplantes u otras enfermedades del sistema inmunitario. Por ejemplo, si podemos manipular estas células o su movimiento, podríamos ayudar a los órganos trasplantados a aceptar mejor al cuerpo del receptor y evitar que el sistema inmunitario los rechace.
Este estudio se hizo en ratones y todavía hay mucho por investigar para saber si sucede igual en los humanos, especialmente en situaciones de inflamación o en diferentes enfermedades. Pero sin duda, abre nuevas puertas para entender cómo se comportan estas células en nuestro cuerpo y cómo podemos utilizarlas en la medicina.
Fuente: https://www.amjtransplant.org/article/S1600-6135(24)00568-9/fulltext